Imagen del disidente chino Liu Xiaobo, a la derecha, con su esposa Liu Xia a la izquierda, en una foto dada a conocer en 2010. Foto: The New York Times.

Liu Xiaobo, el disidente chino más célebre a nivel mundial y merecedor del Premio Nobel de la Paz 2010, fue dejado en libertad por razones médicas luego de que se le diagnosticó con cáncer de hígado terminal, según confirmó hoy su abogado a varios medios de comunicación

Liu Xiaobo estaba en la cárcel desde 2009, cuando el gobierno chino lo condenó por el delito de subversión; fue encerrado luego de redactar un documento conocido como Carta 08, un documento firmado por 300 intelectuales chinos en donde pedían reformas al actual gobierno, tales como la separación de poderes, el derecho al voto, el respeto a los derechos humanos en el país y la abolición del delito de subversión, crimen por el cual Xiaobo fue condenado a prisión.

En un testimonio recogido por el diario El Mundo, su abogado Mo Shaoping detalla información sobre el estado de salud del disidente chino: “He oído que su cáncer de hígado está en la etapa terminal y que está en libertad por razones médicas y para ser tratado en un hospital. La noticia se la dieron a su hermano, Liu Xiaoxuan, que lo ha verificado”.

Al enterarse de las condiciones de su liberación, Amnistía Internacional emitió un comunicado en el que expresa: “Las autoridades chinas deben asegurarse de inmediato de que Liu Xiaobo reciba la atención médica adecuada y que, tanto él como el resto de encarcelados por ejercer sus derechos humanos, sean liberados de inmediato y sin condiciones”. La organización también realizó un llamamiento para que se le levante el arresto domiciliario a Liu Xia, esposa de Liu Xiaobo, quien se encuentra en prisión domiciliaria desde el arresto de su marido.

Liu Xiaobo ya había estado en la cárcel en ocasiones anteriores por su activismo en contra del gobierno de China; cuando le otorgaron el Premio Nobel de la Paz en 2010, el gobierno chino no le permitió asistir y estuvo representado en la ceremonia por una silla vacía.

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