Este tipo de lluvias derivadas del monzón se presentan de junio a septiembre; las recientes deforestaciones dejaron la zona más vulnerable.
La situación al norte de India está en su peor momento tras el deslizamiento de tierra que fue ocasionado por las lluvias monzónicas que azotaron la región. De acuerdo con información de la policía local se encontraron 13 cuerpos sin vida y se prevé que puede haber más víctimas entre los escombros.
Una carretera fue sepultada junto con dos vehículos, dos autobuses y una motocicleta en la aldea de Urla, en la provincia de Himachal Pradesh, por el alud que se deslizó. Los rescatistas y soldados emplearon palas y picos para remover el lodo que «atrapó» a las unidades y así poder extraer los cuerpos que se encontraban dentro; sin embargo, la presencia de la lluvia impidió que se continuaran con las labores.
Además, en las faldas de la cordillera del Himalaya las lluvias arrasaron decenas de casas en la región de Mandi. Sobre los distintos acontecimientos, Nerendra Modi, primer ministro, publicó en Twitter: «Dolido por la pérdida de vidas debido a accidentes relacionados con el deslizamiento de tierra en el distrito de Mandi. Mis condolencias con las familias de los fallecidos».
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