«La verdad no peca pero incomoda», reza el dicho popular. Porque la realidad es cruda y lo recomendable es asimilarla y afrontarla de la mejor manera: la corrupción también se encuentra incrustada en el sistema educativo del país. Ahora salió a la luz pública que diez trabajadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) vendían calificaciones a los alumnos.
Se habla de 624 miembros de la comunidad estudiantil pretendían acceder a esta forma «alternativa» de acreditar materias. Ante esta situación, Enrique Fernández Fassnacht, director general del IPN, dio a conocer que ya se presentaron siete denuncias ante la Procuraduría General de la República (PGR).
Sobre el tema, el dirigente refirió: «Hubo una detección oportuna por parte de la Secretaría de Servicios Educativos del intento de alteración de calificaciones y ninguna alteración logró consumarse». Fernández Fassnacht, acotó que se podía «solicitar» –a través de WhatsApp– la alteración de las boletas de calificaciones por la suma de 3 mil 500 morlacos.
Los planteles del nivel medio superior presentan 19 casos de este tipo, mientras que los de nivel superior registran 605 estudiantes involucrados, según información difundida por el Politécnico.
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