Soldados belgas abatieron a tiros a un presunto terrorista luego de que éste hiciera explotar un artefacto en una céntrica estación de trenes de Bruselas, cerca de la Grand Place o Gran Plaza, un importante atractivo turístico. Este atentado ha sido considerado por las autoridades belgas como un «ataque terrorista», el más reciente de una serie en Europa.
Alrededor de las 8:50pm, soldados que patrullaban la Estación Central «neutralizaron con disparos» al sospechoso, indicó el portavoz de la policía belga, Peter de Waele. La Fiscalía federal confirmó su muerte durante la noche, de acuerdo a AFP.
Los hechos ocurrieron cuando una pequeña explosión cimbró la estación central de trenes de la capital belga, la Gare Central, después de que un hombre gritara «Allahou Akbar» (Alá es grande, en árabe). La explosión habría tenido origen en una pequeña valija o bolsa que cargaba el hombre.
La Fiscalía explicó esta mañana en conferencia de prensa que ese hombre (que no llevaba un cinturón de explosivos como se informó por error anoche en varios medios) se lanzó contra un militar, que disparó contra él mientras la gente corría hacia la calle. El atacante tampoco iba armado y los explosivos que llevaba en la valija o bolsa eran de fabricación casera, hechos con bombonas de gas y clavos.
El gobierno decidió no elevar el nivel de alerta antiterrorista y la Policía lanzó una redada en Molenbeek, distrito donde salieron varios de los terroristas del 22 de marzo del año pasado en Bruselas y de los últimos grandes atentados en París.
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