George Pell, el cardenal considerado como el número tres al mando en el Vaticano llegó hoy a Australia para preparar su defensa y comparecer ante los tribunales el 26 de julio en Melbourne; el religioso está acusado de abuso de menores.
Pell, de 76 años, enfrentará cargos que fueron presentados por la policía apenas a finales del mes pasado; a su llegada a Australia, Pell no quiso hacer declaraciones, a pesar de que el pasado 30 de junio desde Roma, negó todas las acusaciones ante los medios de comunicación.
El cardenal se presentará ante el Tribunal de Melbourne, quienes por motivos legales no pueden dar a conocer ni el número de quejas que enfrenta el cardenal ni la naturaleza de las mismas. No es la primera vez que Pell es acusado del delito de abusos sexuales, ya que cuando era arzobispo en Sidney, una persona del sexo masculino aseguró que el hoy acusado abusó sexualmente de él en 1961, cuando apenas contaba con 12 años de edad y Pell era todavía un sacerdote en formación. En ese entonces, Pell fue exonerado de las acusaciones.
Lo que más llama la atención del caso es que George Pell fue el primer dirigente católico en hacer frente a las acusaciones de abusos sexuales ocurridos en el seno de la iglesia australiana, por lo que puso en marcha en 1996 un programa de compensaciones económicas para las víctimas, aunque siempre fue criticado por que los apoyos no eran suficientes.
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