Porque el deporte es una muestra de que las grandes gestas son posibles sin importar lo difícil que parezcan, los Boston Celtics se sobrepusieron a una desventaja de 21 puntos ante los Cleveland Cavaliers en el tercer juego de la Final de la Conferencia Este.
Con esto, los de Boston obtuvieron su primera victoria de la serie y la consiguieron fuera de casa. Algo que parecía complicado después de haber perdido los dos primeros encuentros en su arena.
Los Celtics se impusieron por marcador de 111-108 con nerviosismo incluido. Pues fue hasta la última décima de segundo cuando Avery Bradley lanzó un triple que dejó a los Cavs sin invicto en los playoffs de este año.
Cleveland tuvo un desempeño notable en los dos primeros cuartos, con un Kevin Love que registró 22 puntos, por 29 de Kyrie Irving. No obstante, el descanso les jugó una mala treta que se sumó al ímpetu de los visitantes que salieron determinados a darle vuelta a la pizarra.
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