El pasado jueves Adalid Maganda recibió la noticia de que había sido dado de baja de la Comisión de Arbitraje. Marco Julio Escobar, representante de este órgano, le aseguró que esta determinación se había tomado debido a su bajo rendimiento; no obstante, el silbante señala que su color de piel es la verdadera razón de su despido.
Comisión de Arbitraje me dio de baja por «pinche negro»: Adalid Maganda - FOTO: OEM

El silbante asegura que el racismo está presente en el país y que el futbol no es la excepción.

Maganda ya había sufrido de racismo en agosto del 2015, en un partido entre Atlante y Pachuca en el que varios jugadores lo insultaron por su color de piel; en ese momento, dijo, recibió el apoyo de Edgardo Codesal, quien era el presidente de la Comisión de Arbitraje.

El pasado jueves Adalid Maganda recibió la noticia de que había sido dado de baja de la Comisión de Arbitraje. Marco Julio Escobar, representante de este órgano, le aseguró que esta determinación se había tomado debido a su bajo rendimiento; no obstante, el silbante señala que su color de piel es la verdadera razón de su despido.

Maganda, oriundo de Guerrero, externó al respecto: «Hace como 15 días yo sí fui a preguntarles a ellos, a los tres y tuvimos una reunión en su oficina, estaban Arturo Brizio (presidente de los árbitros), Jorge Gasso (encargado del área técnica) y Julio Ecobar (auxiliar de Gasso); fui a preguntarles el porqué de mi situación en el arbitraje y no me contestaron nada, solo me daban excusas y a Arturo Brizio le pregunté si era sobre mi color, y se echó una carcajada sarcásticamente».

El árbitro acotó que Brizio le aseguró que ese no era el motivo de la poca actividad que venía teniendo como profesional. «¡Pues díganme si es eso! Y me dijo: ‹nada más te voy a decir que vamos a evaluar tu rendimiento y creo que ya no vas a entrar en planes de la Comisión›». Maganda asegura que en ese encuentro que tuvo con los tres personajes referidos, Gasso le dijo «Y tú, qué haces aquí pinche negro?» y que, acto seguido, Brizio y Escobar  se empezaron a reír.

Adalid refiere que los tres implicados le han comentado que no le dicen negro con «dolo» sino como «desmadre», pero acota que siente un dejo de discriminación en la forma en la que se refieren a su persona.

El silbante, de 34 años, declaró que siempre había sido uno de los más puntuales y protagonistas dentro del gremio, pitando finales de Ascenso y con actividad continua como árbitro central. Sin embargo, desde que llegó Arturo Brizio la situación cambió, bajaron sus apariciones y ya solo lo hacía como cuarto silbante, externó Maganda.

 

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