Se han movilizado más de 13 mil oficiales de rescate.
El presidente surcoreano advirtió que pondrá todos los esfuerzos necesarios para sofocar el fuego e iniciar la recuperación de las zonas dañadas.
El fuego se originó en Goseong, condado montañoso al sur del país, para posteriormente extenderse a las ciudades de Gangneung, Sokcho y Donghae, lo que ha propiciado que el gobierno de Corea del Sur declare emergencia nacional.
Este incendio masivo provocó que más de cuatro mil personas tuvieran que ser desplazadas; dentro del saldo de daños se contabiliza un deceso y 35 heridos, además de los daños a la naturaleza y materiales, que las autoridades han catalogado como de gran magnitud, «sin precedentes».
Ante este desastre, el gobierno movilizó a más de 13 mil oficiales de rescate de todo el país, quienes fueron enviados a las zonas involucradas para tratar de sofocar el fuego y controlar la situación; también se informó que se destinaron 4.25 mil millones de wones (3.7 millones de dólares) para las labores de recuperación.
Moon Jae-In, presidente surcoreano, convocó a una reunión de emergencia en el Centro Nacional de Gestión de Crisis, en Seúl. Tras finalizar el encuentro, el mandatario externó que dio las instrucciones necesarias para combatir el fuego y socorrer a las víctimas: «Les pido que hagan todo lo posible, hasta el último momento en que todas las brasas estén completamente apagadas».
La declaratoria de emergencia nacional ha permitido que el gobierno movilice suministros y demás recursos de socorro de forma rápida. Además, el presidente pidió que las autoridades de las zonas afectadas y los damnificados puedan acceder a recursos gubernamentales para que todo vuelva a la normalidad lo antes posible.
HOY NOVEDADES/MI MUNNDO