La ciudadana rusa es acusada de conspiración y de ser una agente secreta en Estados Unidos.
Algunos demócratas siguen criticando la actitud de Trum en el encuentro con Putin, donde negaron cualquier tipo de intervencionismo ruso.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos dio a conocer que se detuvo a una mujer rusa por presuntamente haber fungido como espía del Kremlin durante la pasada campaña presidencial del 2016 y, además, haber intentado concretar dos reuniones clandestinas entre Donald Trump y Vladimir Putin; esto ocurrió unas horas antes de que ambos mandatarios se reunieran en Helsinki.
La detenida es Maria Butina y se le acusa de haber entablado diversos contactos, uno de ellos con el equipo de campaña de Trump en busca de favorecer los intereses de Rusia de cara a las elecciones estadounidenses.
De acuerdo con el periódico The New York Times, Butina estuvo en contacto con Paul Erickson, integrante de la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés).
En relación con este tema Chuck Schummer, líder demócrata en el Senado, habló sobre la cumbre entre Trump y Putin: ««No hay una equivalencia moral entre Estados Unidos y Rusia, que sigue siendo hostil a nuestros valores básico e ideales (…) en toda la historia de nuestro país, nunca los estadounidenses vieron a su presidente apoyar a un adversario de Estados Unidos como Trump ha apoyado al presidente Putin».
Cabe mencionar que tras su reunión en Helsinki tanto Putin como Trump negaron cualquier tipo de injerencia del gobierno ruso en las pasadas elecciones presidenciales de Estados Unidos.
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