A través de una consulta realizada por el diario Excelsior, especialistas en legislación ambiental indicaron que la mujer que paseó con un cachorro de tigre de Bengala en Plaza Antara en Polanco el pasado fin de semana, cometió una infracción a la Ley General de Vida Silvestre.
Según la norma en su artículo 78, el animal exótico debe permanecer en confinamiento, por lo que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), debe actuar en consecuencia.
Asimismo, la Profepa debe verificar la procedencia legal del tigre de Bengala. Además de una factura o nota que acrediten la compra legal del cachorro, el animal debe contar con un chip o tatuaje que demuestren que fue adquirido en un criadero registrado.
Por supuesto, también se deberá comprobar que la casa o el lugar donde se encuentra viviendo actualmente el animal tenga las condiciones necesarias para que éste viva. Por ejemplo, su alimentación, seguridad, atención veterinaria, entre otros aspectos.
En caso de que no se compruebe la legal adquisición del ejemplar, o el lugar de confinamiento no sea el óptimo, la sanción por cada infracción cometida debe calcularse entre 50 y 50 mil Unidades de Medida y Actualización (UMA), es decir, de cuatro mil 344 pesos a cuatro millones 344 mil pesos.
Asimismo, se podría proceder al aseguramiento y decomiso del cachorro, así como la presentación de una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República (FGR).
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