Un tribunal de los Ángeles retiró la tutela que Jamie Spears, padre de la estrella del pop, Britney Spears, ejercía sobre su hija desde el año 2008.
La suspensión es de efecto inmediato y será reemplazado con un tutor provisional que, según la jueza Brenda Penny, convenga a los intereses de la ex cantante y sólo será hasta el 31 de diciembre.
«El señor Spears debe entregar todos sus activos y poderes como tutor», dijo Penny durante la audiencia que duró más de dos horas.
Las finanzas y prácticamente todas las decisiones personales de Britney eran controladas por su padre desde hace 13 años luego de que ella atacara a un paparazzi en una estación de gasolina.
Un documental de The New York Times divulgado hace una semana afirma que Jamie Spears tenía aparatos de vigilancia instalados secretamente en el cuarto de Britney para grabar sus conversaciones.
La fortuna de la llamada Princesa del pop, de 39 años de edad, está valuada en 60 millones de dólares, de los cuales ahora podrá disponer por cuenta propia.
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