El viernes 3 de febrero, padres de familia, profesores y alumnos de la Escuela Secundaria 126 «Tlahuizcalli», se manifestaron en la avenida Tláhuac, frente a la estación del metro Zapotitlán, para exigir respuesta de las autoridades delegacionales y de la Secretaría de Educación Pública (SEP), por el desprendimiento del plafón en un salón del plantel, a sólo 3 años de su construcción.
Con pancartas, estudiantes mostraron su inconformidad, luego de que el lunes 30 de enero del año en curso, uno de los plafones del techo de un salón de clases, se viniera abajo, causando la suspensión de las labores académicas en la secundaria.
De acuerdo con declaraciones de padres de familia a Hoy Novedades, el plafón que pesa aproximadamente 30 o 40 kilos, sólo estaba sujeto al techo con pijas de 2 a 3 centímetros, por lo que no soportaron el peso y cayeron.
El lunes 30 de enero, los estudiantes de la secundaria se encontraban tomando clases, cuando, de acuerdo con una madre de familia, la maestra escuchó un crujido e inmediatamente pidió a los alumnos que desalojaran el salón de clases, por lo que no hubo ningún herido durante el percance.
Al momento, la solución que han propuesto las autoridades es enviar a los 800 alumnos a otras escuelas en díasalternativos, una o dos veces por semana; sin embargo, algunos alumnos mostraron su descontento con la medida por posible acoso escolar por parte de los alumnos del otro plantel.
La Delegación Tláhuac, sólo ha pronunciado al respecto, que el percance ocurrió debido a la poca resistencia de los materiales como el durok y que se colocarían focos para reanudar las clases, sin embargo, los alumnos y padres de familia dicen que no han tenido respuesta.
En entrevista con Hoy Novedades, el alumno Eduardo comentó que no se sienten cómodos con la medida de asistir a la secundaria 205 y que: «Está mal que no nos hagan caso. Dónde están los 36 millones de pesos. No se ven reflejados».
Mientras que Víctor, otro estudiante de la secundaria 126 que se encontraba en la manifestación, agregó: «Está mal. No hay que ser conformistas e irnos a otra escuela, para eso se dio el dinero y el tiempo».
Cabe destacar que la escuela fue reconstruida y apenas hace 3 años inició sus actividades, después de ser demolida en mayo de 2011, por presentar fracturas en sus instalaciones, debido al terremoto de 1985 y a la construcción de la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo Metro.
En 2009, la Secretaría de Protección Civil capitalina realizó una revisión técnica ocular y concluyó que los edificios de la secundaria, ubicada en Santiago Zapotitlán, ya presentaban daños severos, por lo que solicitó su desalojo inmediato.
En mayo de 2011, dos años más tarde, por fin se demolió el inmueble, para comenzar la construcción de la nueva secundaria.
Sin embargo, en 2012 aún no se comenzaba la construcción, los 800 alumnos estudiaban en aulas improvisadas en el Deportivo de Santiago Zapotitlán, el terreno estaba lleno de basura, yerbas y vasos de cartón con el nombre de una cervecera y el delegado de Tláhuac en turno, Rubén Escamilla, aseguraba que el retraso se debía a que el terreno era propiedad del gobierno local y no federal, por lo que no se podía realizar la inversión.
En abril de 2012, se liberaron por fin 4 millones de pesos de la federación, para iniciar con el proyecto, y se esperaba que la construcción iniciara en el segundo semestre de ese año, con una inversión total de 78 millones de pesos, según Rubén Escamilla.
De acuerdo con El Universal, 35 millones de pesos, sólo sirvieron para equipar el plantel que se construyó en seis mil 129 metros cuadrados, para atender a los 889 alumnos por turno. Sin embargo, a la fecha, pueden verse una escuela a medio construir, con varillas de fuera.
HOY NOVEDADES/CIUDAD