Los ataques se realizaron en noviembre del año pasado; Raúl Castro negó cualquier responsabilidad.
El funcionario del gobierno estadounidense habló sobre esta situación en un programa televisivo de la cadena CBS.
Después de los llamados «ataques sónicos» que sufrieron 21 diplomáticos estadounidenses de en la capital de Cuba, autoridades norteamericanas está pensando en cerrar la embajada que tiene en la isla. Así lo dio a conocer Rex Tillerson, secretario de gobierno de Estados Unidos.
Durante una entrevista con el programa «Face the Nation», el funcionario estadounidense advirtió que esta decisión se encuentra «bajo revisión». Además, señaló que los diplomáticos referidos mostraron daños en su salud que aún no han podido ser explicados, situación que consideró «muy grave».
Cabe recordar que en un principio el secretario se refería a estos ataques como «ataques a la salud», sin embargo el Departamento de Estado los califica como «incidentes». Las consecuencias de este misterioso ataque son: dolores de cabeza, pérdida de memoria, náuseas, contusiones cerebrales, daños neurológicos, pérdida del oído y zumbidos en los mismos.
Sobre esta situación Jeffrey DeLaurentis, diplomático estadounidense, se reunió con Raúl Castro, presidente de Cuba. En dicho encuentro el mandatario cubano se dijo preocupado y sorprendido, y añadió que estuvo en toda la disposición de recibir al FBI para la investigación pertinente.
HOY NOVEDADES/MI MUNDO