La operación de injerencia rusa comenzó desde 2014.
Rick Gates y Paul Manafort continúan siendo investigados por su participación en la injerencia rusa en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
El colaborador del presidente Donald Trump, al menos en el periodo de su campaña electoral, Rick Gates, se declaró culpable a los cargos de conspiración y falso testimonio, esto en el marco de las investigaciones sobre la posible injerencia de Rusia en los comicios presidenciales de 2016 en Estados Unidos.
Gates, quien en un pasado se había declarado inocente, según algunos expertos, podría dar paso a una posible colaboración con el Departamento de Justicia estadounidense, con la finalidad de ver reducida su sentencia, mismo que podría llegar a 71 meses de prisión, de acuerdo a los informes judiciales.
Las investigaciones realizadas por el fiscal especial, Robert Muller alcanzaron a Gates y a su socio Paul Manafort, exdirector de la campaña de Donald Trump, sin embargo, Manafort continúa insistiendo en ser inocente, pese a las 32 nuevas pruebas que el fiscal presentó sobre el caso.
Por su parte, Gates aceptó, entre otros cargos, haber defraudado a los Estados Unidos sobre los ingresos de su socio (Manafort) y los de él mismo. Cabe recordar que ambos ya han pagado una fianza de 5 y 10 millones de dólares, respectivamente, además de entregar sus pasaportes para evitar que salgan del país.
El caso de la injerencia rusa en las elecciones presidenciales de Estados Unidos ha comenzado a adquirir un segundo momento álgido, luego de que el país norteamericano señalará a 13 ciudadanos de Rusia, no obstante, esta semana se dio a conocer que desde 2014 comenzó la operación de intrusión, a través de redes sociales, para perjudicar a la entonces candidata Hillary Clinton.
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