Se reconoció el apoyo de amigos, familiares y público en general que estuvo presente en la ruta
Los 42.195 kilómetros recorridos del Maratón de la Ciudad de México tuvieron como finalidad apoyar a asociaciones altruistas en pro de quienes más lo necesitan, así como de buscar mejoras en el medio ambiente.
El Maratón de la Ciudad de México en su XXXVII edición fue el escenario para demostrar que se pueden realizar proyectos sustentables y altruistas enfocados en la preocupación de ser socialmente responsables de problemas que nos atañen a todos, como el cambio climático y el apoyo a quienes cuentan con escasos recursos.
Es por ello que, con el fin de fomentar el altruismo y el deporte, el Lic. Ernesto Archundia, gerente general de Bé, participó en el maratón de la CDMX cuyo inicio se marcó frente a la torre de Rectoría, en Ciudad Universitaria, y culminó sus 42 kilómetros y 195 metros en el Zócalo capitalino.
El tiempo total del recorrido realizado por el Lic. Archundia fue de 5:04:34, con un promedio de siete minutos y medio por kilómetro recorrido, demostrando a las generaciones más jóvenes que todo reto es superable, con esfuerzo, dedicación y entrenamiento.
Al respecto, el gerente general de Bé —Empresa Socialmente Responsable que obtuvo por segundo año consecutivo el distintivo ESR— detalló que no fue una tarea sencilla, pues previamente se preparó para esta competencia en el Medio Maratón de la Ciudad de México y en otras carreras, como la Kardias, la Atlética Día de Reyes, la del Día del padre y la carrera San Pedro Atlixco.
Sobre la competencia, el Lic. Archundia detalló que durante la carrera se contó con el apoyo de la gente, familia y amigos que estuvieron presentes en todo el recorrido, además de los propios competidores quienes muestran espíritu deportivo al alentar a continuar a otros participantes.
«No es fácil, hay momentos en los que ya no te responden las piernas (…) por eso había algunos corredores que no aguantaron y terminaban en el piso, pero el saber que te apoya tu familia y tus amigos en el evento, te da motivación para continuar», por lo que extendió una invitación a los asociados a participar en este tipo de carreras.
Apoyado en la línea de arranque, meta y durante algunos tramos de la ruta por familiares, amigos y miembros de la Fundación Dany Ayudando a Vivir, el corredor detalló que el altruismo es otro de los factores por los cuales se busca participar en este tipo de eventos deportivos.
«Correr por una causa siempre es un factor importante, pues con ello se permite que las instituciones junten recursos para personas que lo requieran, ya sea que no puedan pagar una consulta médica o necesiten transporte para acudir a terapias».
En esta ocasión, el XXXVII Maratón de la Ciudad de México destinará parte de lo recaudado a la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer I.A.P.; Angelitos de Cristal I.A.P.; Educación para Compartir; Naturalia, Comité para la Conservación de Especies Silvestres A.C.; Fundación Paola Espinosa A.C.; y la Fundación Mexicana del Pie Equino Varo A.C.
Del mismo modo, la carrera sirvió para realizar una prueba de un proyecto ambiental en el que se buscaba medir la calidad del aire y ver cómo influye en el desempeño de los atletas, por lo que se usaron sensores para monitorear los contaminantes del aire previo al Maratón, así como mientras circulaban los autos y, de esta forma, poder tener comparación a la hora de comenzar a analizar los resultados.
Bé, como Empresa Socialmente Responsable, es consciente de la importancia que tienen estos eventos con el fin de buscar una solución a problemas de impacto social como lo son el cambio climático, el apoyo a personas con escasos recursos, además de promover el deporte y la activación física entre sus asociados.
Cabe destacar que el pasado 30 de agosto el Centro Mexicano para la Filantropía le otorgó a Bé el distintivo ESR 2019 y Bé por segundo año consecutivo; dicho logro continuará mediante la implementación de los principios de Empresa Socialmente Responsable.
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