El legendario centrocampista de Chelsea se retira de las canchas
Uno más de la generación dorada de Inglaterra que se retira.
El legendario centrocampista del Chelsea y de la Selección de Inglaterra, Joe Cole, anunció su retiro de las canchas, luego de 20 años de trayectoria, mismos que lo llevaron a convertirse en una de las figuras más representativas del balompié británico en los últimos años.
Con 37 años cumplidos, Cole participó en 716 encuentros oficiales y vistió la camiseta de Inglaterra en 56 partidos, además de tener el honor de jugar en tres copas mundiales, al lado de la que muchos denominaron la generación dorada, junto a figuras de la talla de David Beckham, Wayne Rooney, John Terry, Frank Lampard, rio Ferdinand, Paul Scholes y Michael Owen, muchos de ellos ya retirados.
Aunque el mediocampista debutó con el West Ham en 1998, sus mejores años los pasó con el Chelsea, cuando fue comprado por el equipo en 2003 y dos años después se convirtió en campeón de Inglaterra. Sin embargo, fue también con los «Blues» donde pasó su más amarga derrota, al perder la Liga de Campeones en el verano de 2008.
«Después de 20 años como profesional ha llegado el momento de colgar las botas. Ha sido un sueño hecho realidad», expresó el jugador, al tiempo que el Chelsea agradeció «tantos recuerdos» junto a él.
Cole consiguió dos títulos de la Premier League y tres de la AF Cup, todos con el Chelsea, pero al final de su carrera, regresó en 2013 al West Ham, después tuvo un breve paso por el Aston Villa y el Coventry City, para finalmente retirarse en la MLS, jugando para el Tampa bay Rowdies.
La generación dorada de Inglaterra
El final de la década de 1990 y principios del nuevo milenio vio surgir a una de las mejores selecciones de Inglaterra en su historia, sin embargo, con jugadores mediáticos y establecidos como figuras en sus respectivos equipos, les fue imposible conseguir un campeonato mundial y europeo.
Las causas, según comentó Steven Gerard en un programa de televisión, pudieron ser la excesiva competitividad que existía en el vestidor, sobre todo porque muchos eran rivales en competiciones a nivel de clubes. «No nos odiamos, pero por naturaleza nos sentábamos en mesas diferentes. Creo que era más una relación de respeto que de cercanía, cuando ahí debía haber amor».
«Te apasiona tanto el club, tus propias actuaciones, que ser poco amigable con alguien con quien compites pudo haber retenido a Inglaterra», comento el mediocampista Frank Lampard, durante la misma entrevista.
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