El plan de renovación de vivienda del presidente ruso, Vladimir Putin no ha sido del agrado de muchos en dicho país, debido a que contempla el derribo de miles de edificios de apartamentos de la época soviética, los cuales son considerados históricos por algunos ciudadanos, por ello, el pasado domingo miles de personas salieron hoy a las calles de Moscú para protestar contra dicha medida.
Los manifestantes portaban pancartas con lemas como: “contra la renovación, contra la deportación”, “no a la demolición”, “mi casa es mi fortaleza” o “defendamos la propiedad privada”. A ellos les incomoda la idea de tener que trasladarse a otro lugar para vivir, así como la pérdida de valor de las propiedades.
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