Fue uno de los comediantes más reconocidos de su tiempo.

Su época dorada fue con la productora de cine Paramount.

Jerry Lewis, leyenda de la comedia y una de las últimas caras del Hollywood clásico, falleció hoy a los 91 años en su casa de Las Vegas, según ha confirmado su representante a la revista especializada Variety. El actor y director ha muerto por causas naturales, rodeado de su familia a las 9:15 (hora local).

Jerry Lewis, inició su carrera artística como la mitad del dúo humorístico con Dean Martin en bares y radios, se convirtió en los años sesenta en uno de los rostros más importantes de la meca del cine, logrando mayores contratos en exclusiva de la época, gracias al éxito en taquilla de su habilidad para las muecas y el slapstick.

En la productora Paramount, que lo firmó con un contrato de 14 película el en siete años por 10 millones de dólares, se convirtió en el nombre más importante y allí logró libertad absoluta para hacer todo lo que quisiera. En aquella época estrenó El botones (1960) o El profesor chiflado (1963) y Las joyas de la familia (1965), dirigidas por él. Sus personajes maniáticos pero adorables se multiplicaban y repetían.

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