La protesta de conductores de la línea 7 del Sistema de Transporte Colectivo (SCT) Metro que se presentó la mañana del pasado viernes no tiene nada que ver con un trasfondo político, es la idea que tiene Miguel Ángel Mancera Espinosa, jefe de gobierno de la Ciudad de México.
Esto pese a que en días pasados Fernando Espino, líder sindical del Metro, manifestó públicamente su apoyo a Delfina Gómez, candidata de Morena a la gubernatura del Estado de México.
Los 71 trabajadores inconformes dejaron de prestar su servicio durante al menos una hora para exigir el pago de horas extra y algunas prestaciones, lo que propició una fuerte acumulación de usuarios que pagaron con su tiempo este hecho de protesta.
El mandatario señaló que Jorge Gaviño, director del SCT Metro, ya se puso en comunicación directa con el sindicato y, de esta forma, no hay posibilidad alguna de que el servicio se suspenda.
Mancera Espinosa puntualizó que confía en la buena voluntad de las autoridades responsables del SCT Metro, por lo cual no espera un evento de esta índole. Además señaló al respecto: «No creo de ninguna manera que sea una actitud política partidista, sino una situación sindical que vamos a resolver».
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