Esto forma parte de los juegos de guerra que se han creado para depurar las tropas rusas en medio de las tensiones con occidente.
Algunos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han cuestionado fuertemente este tipo de ejercicios del gobierno ruso, señalando que demuestran falta de transparencia y ocultan sus verdaderas intenciones.
Ahora las maniobras militares fueron en territorio ruso e incluyeron el lanzamiento de cuatro misiles balísticos intercontinentales. De esta forma el presidente ruso Vladimir Putin –quien estuvo presente durante los ensayos– dice presente en la lista que ya notificaron su homólogo estadounidense Donald Trump y Kim Jong-un, jefe del estado norcoreano.
Al respecto Dmitry Peskov, portavoz el gobierno ruso, detalló que los ejercicios incluyeron todos los elementos que componen la triada nuclear militar: bombarderos estratégicos, submarinos nucleares y baterías de misiles en tierra. Sin embargo, advirtió que estas maniobras son de rutina y no tienen nada que ver con algún suceso en particular a nivel mundial.
Esto fue revelado por el Kremlin, situación que sorprende pues no se acostumbra difundir este tipo de actos y menos si Putin participa en ellos, por lo que la información ha trascendido más de lo normal en medios internacionales.
Cabe recordar que el último episodio ruso de esta índole se presentó en septiembre pasado, cuando se realizaron los ejercicios militares Zapad 2017 de forma conjunta con Bielorrusia; en los cuales participaron 12 700 militares (5 500 rusos y 7 200 bielorrusos), que también fueron condenados por la OTAN.
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