River Plate busca su cuarta Copa Libertadores, Boca Juniors la séptima.
Las puertas de El Monumental se abrirán cinco horas antes del inicio del juego. Habrá 2 200 elementos de seguridad en las inmediaciones del estadio.
El día se acerca y la llamada «súper final» entre River Plate y Boca Juniors está por tener su segundo capítulo. Ahora la cita es en el estadio Antonio Vespucio Liberti, mejor conocido como El Monumental, en donde los millonarios recibirán a los xeneizes para ver quién se lleva el trofeo de la Copa Libertadores.
Tras el empate a dos goles que se dio en el juego de ida, disputado en la cancha de Boca, ahora ambos conjuntos buscarán este sábado la gloria continental. Los dirigidos por Marcelo Gallardo llegan a la final de vuelta con su ofensiva disminuida tras la suspensión por doble tarjeta amarilla de Rafael Santos Borré y la lesión de Ignacio Scocco, por lo que solo estarán disponibles Lucas Pratto, Rodrigo Mora y Julián Álvarez (joven de 18 años) como atacantes.
El técnico millonario habló sobre su experiencia en el juego de ida, en el cual no pudo estar en la banca debido a una suspensión: «Fue horrible, una sensación muy fea. Tenía angustia, viví el partido incómodo y con mucha tensión». Gallardo tampoco podrá hacer acto de presencia en la cancha el sábado, deberá ver el duelo desde un palco.
Por otro lado el equipo de Guillermo Barros Schelotto luce más completo. El mellizo tendrá más de dónde elegir a la hora de armar su delantera, la única duda es el cordobés Cristian Pavón, quien sufre un desgarre en la pierna izquierda, sin embargo fue convocado para el juego. Además, estarán presentes los argentinos Ramón Ábila, Darío Benedetto y Carlos Tévez, así como los colombianos Edwin Cardona, mediocampista usado como extremo por el técnico, y Sebastián Villa, quien ocuparía el lugar de Pavón si éste no se recupera.
«La final contra River es la más importante de mi carrera. Es por la gloria. Uno sabe la responsabilidad que tiene. El sueño de ser campeón de la Libertadores está intacto y quiero estar ahí», declaró Tévez al ser cuestionado sobre su posible titularidad.
Seguridad a tope
Tal y como ocurrió hace dos semanas este sábado también se jugará sin presencia de aficionados visitantes, no obstante, el dispositivo de seguridad implementado por las autoridades es notable. Para el partido de vuelta de desplegarán 2 200 efectivos, 1 300 agentes de policía y 900 privados.
Alrededor del mediodía se cerrarán los accesos para el tránsito y se instalarán tres anillos de seguridad y control de boletos, esto con el propósito de que en los alrededores del inmueble ubicado en el barrio de Núñez solo haya personas con entradas para el partido; además, los menores de 16 años solo podrán ingresar acompañados de un adulto.
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