La semifinal entre los San Antonio Spurs y los Houston Rockets estaba tan pareja que pintaba para alargarse hasta un séptimo juego, sin embargo, el día de ayer el equipo de Texas accedió a la final de la Conferencia Oeste de forma contundente con un marcador de 114-75.
Los Spurs se metieron a la casa de los Rockets para poner la serie 4-2 y oficializar el duelo contra los Golden State Warriors por la supremacía del Oeste. LaMarcus Aldridge fue pieza clave para esta victoria al registrar 34 puntos y 12 rebotes, mientras que el español Pau Gasol también aportó lo suyo al sumar diez unidades, 11 rebotes, cinco asistencias y tres bloqueos.
Los visitantes se fueron al descanso con una ventaja de 19 puntos, diferencia que ya no saltaría en ningún momento. Una de las claves del triunfo de los de San Antonio fue el haber disminuido el desempeño de James Harden, líder de los locales.
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