Además, en esta ley se denominan a las zonas que no están bajo el control de Kiev como «territorios ocupados».
Esta situación pone en riesgo el posible acuerdo político que se había dado en conversaciones previas entre ambas partes. Francia y Alemania han fungido como mediadores en las negociaciones.
La tensión en el este de Ucrania que ya se convirtió en conflicto armado tiene un episodio mas. Solo que ahora el hecho se dio en el marco legal, puesto que el gobierno ucraniano ha promulgado una ley que califica a Rusia como «país agresor».
Esto viene en contra del principio de acuerdo que se logró en Minsk, Bielorrusia, en donde los separatistas de Lugansk y Donietsk, apoyados por el gobierno ruso, se sentaron a dialogar con los representantes de Ucrania.
Sobre el llamado proceso de Minsk, Donald Trump y su homlogo kazajo, Nursultan Nazarbayev, han declarado que se encuentra «muerto». Por esto, ambos mandatarios han propuesto trasladar las negociaciones a otro lugar.
Al enterarse de este pronunciamiento de sus colegas, Vladimir Putin –quien apenas salía de remojarse en agua helada– reunió a su consejo de seguridad para anunciar que Minsk es la única opción para seguir con las charlas en busca de un acuerdo pacifico.
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