«No más corrupción inmobiliaria, queremos un parque, el pueblo ya se enojó, Mancera los traicionó». Esta fue la principal consigna de los cerca de 70 manifestantes que se presentaron en la lateral de la carretera México-Toluca y en la avenida Vasco de Quiroga. Los inconformes –vecinos de la delegación Cuajimalpa y Álvaro Obregón–, exigieron a las autoridades capitalinas detener la construcción de mil 600 viviendas en el predio La Mexicana, en Santa Fe.
Durante su marcha, los inconformes no han tomado en cuenta el daño urbano y ambiental que conllevan los trabajos de construcción, incluso demandaron que el gobierno de la Ciudad de la Ciudad de México no ha presentado ningún documento que autorice la factibilidad de los trabajos de construcción que se están realizando.
Uno de los habitantes que se manifestaron puntualizó: «No estamos en la contra de la construcción, pero queremos que nos muestren los estudios correspondientes, principalmente, en impacto vial y urbano. No hay drenaje suficiente, quieren hacer negocio solamente».
Miguel Ángel Mancera Espinosa, jefe de gobierno de la capital, dio a conocer, hace unos meses, que se construirían mil 600 viviendas de interés nacional. Pero en octubre del año pasado, informó que el 70 por ciento del predio, es decir 78 hectáreas, serían utilizados para un parque y las 12 hectáreas restantes se emplearían para desarrollos que aún no se establecían.
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