Son los impuestos un asunto espinoso existente en la vida nacional, desde comerciantes, empresarios, prestadores de servicios profesionales, hasta funcionarios públicos, iglesias, sean personas físicas o morales, casi todos tienen un asunto pendiente con el Servicio de Administración Tributaria, institución encargada realizar la recaudación tributaria. Foto: Reporteros

Son los impuestos un asunto espinoso existente en la vida nacional, desde comerciantes, empresarios, prestadores de servicios profesionales, hasta funcionarios públicos, iglesias, sean personas físicas o morales, casi todos tienen un asunto pendiente con el Servicio de Administración Tributaria, institución encargada realizar la recaudación tributaria.

El SAT ha empleado diversos métodos para tales fines, entre crear un nuevo régimen fiscal, gravar productos que por extrañas razones tiempo atrás no aplicaban (como el IVA sobre productos lácteos saborizados), simplificar trámites vía internet, apps para teléfonos móviles, envío de cartas, telemensajes y mensajes SMS, programas enfocados a la “sensibilización” e inscripción al Registro Federal de Contribuyentes, los que muchos consideran algo semejante a una cacería de brujas, entre otras medidas que aparecen en su abanico de estratagemas.

Todo lo necesario, para “invitar” a la población a cumplir con sus obligaciones fiscales.

Hoy se da a conocer que el año pasado, el Servicio de Administración Tributaria presionó a contribuyentes a través de llamadas y correos, entre otros medios, para que regularizaran su situación fiscal, con lo que recaudó 30 mil 806 millones de pesos, convirtiendo a 2016 como su mejor año  para generar recursos por esa vía.

De acuerdo al brazo fiscal de Hacienda,  con el programa de Vigilancia del cumplimiento se obtuvieron 21 mil 735 millones de pesos en 2016,  siendo el correo electrónico el recurso que más redituó, pues el año pasado envió 28.5 millones de mails a contribuyentes para que aclararan su situación fiscal y obtuvo 13 mil 661 millones de pesos; es decir, en promedio, por cada mail enviado el SAT recuperó 479.50 pesos en los que el contribuyente tenía algún tipo de inconsistencia fiscal.

Con el programa Vigilancia del Cumplimiento, y por medio de los requerimientos a las entidades, modalidad que permite vigilar y solicitar el pago de obligaciones de contribuyentes, por cada uno de los estados, Administración Tributaria obtuvo 4 mil 657 millones de pesos.

A través de cartas, telemensajes y mensajes SMS, otros 3 mil 417 millones de pesos. Con el Programa Caídas Recaudatorias, instrumento que busca evitar la morosidad en algunos contribuyentes, se obtuvieron 9 mil millones de pesos.

Mediante oficios de invitación para que los ciudadanos acudieran a sus oficinas, por omisiones, inconsistencias o comportamientos atípicos al cumplir su obligaciones fiscales y para regularizar esas situaciones, recaudó casi 8 mil 962 millones de pesos. Otros 109 millones se consiguieron de llamadas, correos y cartas.

En la presente administración, tanto con el exjefe Aristóteles Núñez, como ahora con Osvaldo Santín al frente del SAT, el Gobierno Federal ha comunicado año con año, como una cadena, números históricos en lo que al capital recaudado se refiere, inclusive en 2015 la Hacienda Pública informaba que el ingreso tributario fungió como un colchón ante la caída en el sector petrolero.

HOY NOVEDADES/NACIONAL