A lo largo de su carrera, Eduardo Abaroa se ha centrado en piezas y proyectos tridimensionales; sin embargo, su producción también incluye acciones, videos, pinturas y dibujos. Pues el Museo Amparo se precia de tener una exhibición de este artista.
Modificar o darle un sentido distinto a lo habitual es parte de la labor creativa de Abaroa, quien desde 1990 ha desarrollado una producción artística que propone una reconfiguración de lo cotidiano. Su propósito es cambiar la función, percepción y entendimiento establecido que tienen los objetos, espacios o situaciones comunes y conocidas; para esto, en muchas ocasiones lo hace desde una perspectiva humorística.
La página de internet del recinto acota sobre la muestra: «La presencia física de este mundo ordinario trastocado, a través de esculturas, instalaciones o intervenciones en el espacio público, parece materializar la posibilidad de que la esfera de lo cotidiano pueda ser y entenderse de distintas maneras. Su obra proporciona así́ una “fenomenología oblicua de la vida ordinaria”. El humor toma una función crítica en esto: confunde expectativas y produce una actualidad singular, juega y cuestiona las practicas aceptadas o reconocidas por una sociedad, y transforma el estado existente de las cosas abriendo nuevas perspectivas y posibles cuestionamientos sobre éste».
El legado del arte a través del siglo XX es parte de la reflexión que este artista realiza desde su práctica creativa. En muchas ocasiones sus piezas resaltan problemáticas o realizan observaciones críticas. La construcción de identidad, los usos de la ciencia y la tecnología, los efectos que pueden tener en la comunicación, el medio ambiente y en la percepción de la realidad.
No lo pienses dos veces, lánzate al Muse Amparo para conocer de cerca esta fascinante muestra, la cual estará abierta al público hasta el próximo dos de octubre.
HOY NOVEDADES/CULTURA PUEBLA