Se trata de un menor de edad que estaba siendo atendido en Galveston, Texas.
Las autoridades reportaron que aún se encuentran hospitalizadas 10 personas; hasta ahora se ha recabado restos de 68.
A más de 30 días de la explosión de una toma clandestina en el municipio de Tlahuelilpan en el estado de Hidalgo, el secretario de Salud federal Jorge Alcocer Varela informó que la cifra de personas fallecidas ascendió a 133, esto luego de que uno de los menores de edad que fueron trasladados a una unidad especial en Galveston, Texas perdiera la vida.
De acuerdo con la información, el menor tenía 15 años de edad y consecuencia del siniestro, tenía el 87 por ciento del cuerpo quemado. El pasado 29 de enero fue trasladado a esta ciudad estadounidense tras permanecer en el Centro Nacional de Investigación y Atención a Quemados del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) en la Ciudad de México.
De acuerdo con el funcionario, actualmente permanecen internados 10 personas que aún cuentan con heridas de aquel accidente, de ellos uno tiene diagnóstico de muy grave, tres se encuentran delicados y tres más ya están estables; seis más fueron dados de alta. En cuanto a los menores que fueron llevados a Galveston dijo que aún se encuentran bajo cuidados estrictos tres personas.
Cabe señalar que hasta ahora y de acuerdo con los datos recopilados por el Ministerio Público y la Fiscalía, se han recabado 68 restos humanos los cuales están siendo analizados mediante pruebas que, según las autoridades, tardarán hasta seis meses en arrojar datos que permitan identificar a las víctimas.
Mientras tanto, hace casi una semana, al cumplirse un mes de esta tragedia, los familiares de las víctimas llevaron flores al lugar del accidente con el fin de recordar a sus familiares. A ello se suma la entrega que la diócesis de Hidalgo ha hecho de los 130 rosarios que el Papa Francisco envió a los deudos.
La entrega de estos objetos religiosos se hizo en la misa ofrecida el domingo pasado en la capilla de San Francisco de Asis. Ahí, estuvieron presentes los obispos de Huejutla, José Hirais Beltrán; de Tula, Juan Pedro Juárez Meléndez y de Tulancingo, Domingo Díaz Martínez. A ellos se sumó el gobernador de la entidad, Omar Fayad; el secretario de Gobierno, Simón Vargas Aguilar y el presidente municipal de Tlahuelilpan, Juan Pedro Cruz Frías.
HOY NOVEDADES/HIDALGO