China se propone convertirse en una superpotencia del fútbol mundial, con miras a organizar una Copa del Mundo en 2050 y, para ello, impulsa un plan que prevé una inversión superior a los 800 mil millones de dólares en la próxima década.
Además, los clubes de la Superliga china buscan hacerse de grandes figuras del fútbol mundial con base en la inversión de sumas millonarias de dinero, por lo que han lanzado ofertas extravagantes por Lionel Messi, por Cristiano Ronaldo y por Neymar.
De forma paralela, el Gobierno de Pekín y la Federación China de Fútbol lanzaron, el año pasado, un plan que tiene como objetivo que el país sea una «superpotencia mundial de fútbol» en 2050.
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