Este fin de semana, China permitirá el acceso de aficionados al futbol a un estadio para presenciar un partido de la Superliga del país asiático. Será la primera vez que se juegue con público en vivo desde que inicio la pandemia de Covid-19.
Hasta el momento los juegos de futbol en ese país se habían desarrollado a puerta cerrada en estadios neutrales, en las ciudades de Suzhou y Dalián.
Sin embargo, la federación de futbol y las autoridades de Suzhou asignarán 500 localidades a los aficionados del Shanghai SIPG y otras 500 a los del Pekín Guo’an. Por otro lado, la cifra máxima de asistentes permitidos está aún pendiente de aprobación, aunque se dice que el partido podría ser presenciado por mil 900 personas en total.
Cada espectador deberá contar con un test que demuestre que no se contagió de coronavirus la semana previa, llevar mascarilla, respetar una distancia de al menos un metro, y tomarse la temperatura a la entrada del recinto.
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