Personal de la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa) llevó a cabo una inspección en el municipio de Xochiltepec, en donde clausuró un banco de extracción de recursos pétreos, debido a la afectación de 2.3 hectáreas de terrenos forestales. Foto: Poblanerías

Personal de la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa) llevó a cabo una inspección en el municipio de Xochiltepec, en donde clausuró un banco de extracción de recursos pétreos, debido a la afectación de 2.3 hectáreas de terrenos forestales.

Además de la clausura, se aseguró precautoriamente la maquinaria que se encontraba en el predio ya que no se contaba con la autorización en materia de impacto ambiental. Además, se detalló que el inspeccionado no contaba con la autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales, con lo cual, se afectó la cubierta vegetal predominante en la región.

Igualmente, los responsables, no pudieron acreditar la autorización de impacto ambiental, necesaria toda vez que la afectación ocasionada compromete la capacidad de recuperación del ecosistema, ocasionando daño y deterioro grave de los recursos naturales por las obras que realizaban en el lugar.

Como consecuencia, la Profepa, llevó a cabo una clausura total temporal de las actividades llevadas a cabo en el predio, así como el aseguramiento de maquinaria pesada que se encontraba en el sitio.