El pasado martes, la guardia costera y de fronteras de la Unión Europea (Frontex) anunció la creación de un grupo de expertos para acelerar la repatriación de inmigrantes clandestinos.
La iniciativa «ayudará a mejorar la eficiencia y ofrecerá un apoyo muy necesario a las autoridades nacionales sobrecargadas», en especial en Grecia e Italia, afirmó, en un comunicado, el director ejecutivo de Frontex, Frabrice Leggeri.
El grupo estará formado por 690 monitores, escoltas de deportación y expertos; una composición definida, con base en los análisis de riesgo y previsión de actividades efectuados por Frontex para 2017.
Los funcionarios tendrán como misión, ayudar en la identificación de inmigrantes ilegales y en la adquisición de documentos de viaje que permitan la deportación, para lo que deberán establecer vínculos con las autoridades consulares de los países de origen.
También vigilarán el respeto de los derechos humanos de los inmigrantes, durante los procedimientos de deportación e identificarán a quienes puedan tener derecho a protección internacional.
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