La Fundación Find, a través de su representante, Raúl González de la Vega, denunció ante la Procuraduría General de la República y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que cerca de 250 recién nacidos han sido «vendidos» en hospitales públicos y privados de Sonora, esto, de acuerdo a los registros de dicha institución.
Así mismo, señaló que, aunque se cuenta con registros, además de existir personas detenidas y otras más investigadas por estas desapariciones, no ha sido posible localizar a los menores.
Por ello, se trabaja con las Procuradurías, barras de abogados y especialistas en el tema en iniciativas de ley que prevengan este delito como el contar con las huellas dactilares de las madres biológicas y de los recién nacidos para, en caso de alguna «venta» de bebé, puedan ser localizados con mayor celeridad.
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