Con el objetivo de proteger y preservar el mobiliario urbano de la capital, la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México aprobó adicionar la fracción X al Artículo 224 del Código Penal local, para imponer, de dos a seis años de prisión, a quien hurte equipamiento mobiliario urbano de la Ciudad de México.
La diputada local priista, Jany Robles Ortiz, expuso que a diario se roban entre dos y tres accesorios de este tipo, lo que, de acuerdo con cifras del Sistema de Aguas de la Ciudad de México, generó un gasto, durante los últimos tres años, de más de 30 millones de pesos.
La mayoría de las avenidas principales son afectadas por el hurto de alcantarillas, luminarias y cables de conducción eléctrica, convirtiéndose en trampas mortales, ya que se producen daños a los automovilistas y a los peatones que transitan por esas vías.
Señaló que, en el caso de una coladera de cobre, el costo aproximado para el Gobierno capitalino es de cuatro mil 500 pesos por pieza, mientras que los delincuentes obtienen apenas entre 200 y 400 pesos por su venta.
Durante los primeros siete meses del año pasado, se recibieron 367 reportes de desaparición de accesorios de drenajes en la capital, con mayor incidencia en las delegaciones Gustavo A. Madero, Iztapalapa, Venustiano Carranza y Cuauhtémoc.
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