El fenómeno migratorio tiene características internas e internacionales en Sonora, en el cual confluyen paisanos de los diferentes estados del país, los mismos ciudadanos sonorenses y los extranjeros procedentes de Centroamérica y otros países.
De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el capítulo de Movimientos Migratorios se contabiliza la llamada Emigración Interna, e indica que en 2005, salieron de Sonora 58 mil 281 personas para radicar en otra entidad.
El estudio precisó que de cada cien personas salidas de territorio sonorense, 28 se fueron a vivir a Baja California, 19 a Sinaloa, seis a Jalisco, cinco a Baja California Sur, cinco a Chihuahua, y las restantes 37 a una diversidad de estados. Agregó que en cuanto a Inmigración Interna, según el Censo de Población y Vivienda 2010, en dicho año llegaron en total 78 mil 545 personas a vivir a Sonora, procedentes del resto de las entidades del país.
Indicó que de cada cien personas, 25 provinieron de Sinaloa, 21 de Baja California, ocho de Chihuahua, cinco del Distrito Federal y 5 de Jalisco, entre las procedentes de otras entidades. En el rubro de Migración Internacional, en el año 2010, de cada cien migrantes internacionales originarios del estado de Sonora, 96 se fueron a Estados Unidos, en tanto que el dato a nivel nacional fue de 89 de cada cien.
En los municipios fronterizos de Sonora, dos de las principales casas de asistencia a connacionales y extranjeros son la Casa del Migrante La Divina Providencia, en San Luis Río Colorado, y el Albergue San Juan Bosco, en Nogales.
Según el patronato de la Casa del Migrante La Divina Providencia, entre 2015 y 2016 fueron atendidas poco más de 22 mil personas anualmente. La mayoría de quienes solicitan asistencia son residentes de estados del sur de México, como Guerrero, Oaxaca, Jalisco y Chiapas, pero también llegan ciudadanos originarios de Guatemala, El Salvador, Honduras y otros países de Centroamérica.
HOY NOVEDADES/SONORA