Distintas organizaciones civiles integrantes del Frente por la Libertad de Expresión y la Protesta Social (FLEPS) y el Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrilero (CDHZL,) señalaron al gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, de estar detrás de los disturbios ocurridos en la entidad al enviar grupos de provocadores e infiltrados a los centros comerciales saqueados, con la intención de generar pánico en contra de la población, especialmente aquella que ha salido a manifestarse pacíficamente en contra del alza del precio de la gasolina.
De acuerdo al FLEPS los actos vandálicos han sido la excusa perfecta para desplegar las fuerzas antimotines, usar gas lacrimógeno y hacer detenciones con el objetivo de intimidar a los manifestantes pacíficos, quienes han condenado los disturbios en comercios y gasolineras, asegurando que las organizaciones a las que pertenecen están reforzando la seguridad con el objetivo de evitar que policías y provocadores vestidos de civiles azuzados por el gobierno, legisladores o empresarios ingresen a sus filas.
Finalmente, José Antonio Lara Luque, coordinador de CDHZL, hizo un llamado a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) para que envíen personal a monitorear y vigilar el desarrollo de las protestas, y una vez analizada la situación emitan recomendaciones que garanticen la libertad de expresión y protestas sin que los participantes pacíficos teman por su seguridad.
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