Las víctimas dieron testimonio de la violencia e inseguridad que los obligaron a dejar sus comunidades.
Personal del instituto visitó Chalchihuitán y Chenalhó para constatar la situación de los desplazados.
A través de una visita realizada a Chalchihuitán y a Chenalhó, personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) constató las condiciones de riesgo en que viven y permanecen las más de 5 mil personas desplazadas a causa del conflicto territorial que surgió desde fines de noviembre, entre estas comunidades. Los representantes del organismo destacaron la urgencia de fortalecer las acciones de apoyo humanitario para prevenir «hechos de difícil o imposible reparación».
La situación de los habitantes de Chiapas es similar a la de los desplazados internos: un desplazado interno es alguien que es forzado a dejar su hogar, pero que se mantiene dentro de las fronteras de su país. Las causas más frecuentes para que se propicie este fenómeno son: la violencia generalizada, conflictos armados y violaciones a los derechos humanos. En muchos casos los desplazados son amparados por su gobierno y en otros el mismo gobierno es causante del desplazamiento. A nivel global el número de desplazados se aproxima a 65,3 millones de personas. Las personas en esta condición poseen todos los derechos que poseen como ciudadanos, la protección del derecho internacional humanitario y el derecho internacional de los derechos humanos.
Urge atender medidas cautelares de 5000 desplazados en #Chiapas ante el brusco descenso de la temperatura en esta época invernal y el precario estado de salud en que se encuentra esa población. pic.twitter.com/AXcK1JX6Pw
— CNDH en México (@CNDH) 22 de diciembre de 2017
Verifica #CNDH condiciones en que viven personas desplazadas por conflicto entre Chenalhó y Chalchihuitán, #Chiapas, y reitera urgencia de fortalecer acciones de apoyo humanitario. ? https://t.co/A6tMngRkVl pic.twitter.com/34aYrkm0dQ
— CNDH en México (@CNDH) 22 de diciembre de 2017
Las personas afectadas por este desplazamiento forzado, que antes tenían su vida y propiedades en Chenalhó y Chalchihuitán y que tuvieron que huir y dejar abandonado todo para salvar sus vidas, refirieron al personal del organismo que continúan la violencia e inseguridad que los obligaron a dejar sus hogares, por lo cual demandaron que se les otorguen garantías de protección a su integridad física y la de sus familias, así como propiciar condiciones adecuadas de retorno a sus poblaciones.
La CNDH reiteró las medidas cautelares enviadas a las autoridades de los tres niveles de gobierno para atender esta situación, sobre todo haciendo énfasis en que los descensos bruscos de temperatura en esta época invernal y el precario estado de salud en el que se encuentra esta población.
La comisión detalló que personal de las oficinas de la CNDH ubicadas en San Cristóbal de las Casas, Chiapas; Ixtepec, Oaxaca; Veracruz, estado de Veracruz, y Villahermosa, Tabasco, encabezado por el Quinto Visitador General, Édgar Corzo Sosa, se trasladó a la zona de conflicto para entrevistar a las personas afectadas, quienes informaron de la falta de insumos básicos para su dieta, como maíz, frijol y azúcar, y denunciaron que los productos alimenticios que se les han proporcionado están fuera de sus hábitos de consumo, lo que les ha ocasionado enfermedades gastrointestinales.
Por su parte, la Policía Estatal Preventiva del Estado de Chiapas dio a conocer que las localidades donde se presentan los desplazamientos son: Pom, Ch’enmut, Canalumtic, Emiliano Zapata, Tzomoltón y Cruztón, en el municipio de Chalchihuitán, y Yabteclum, Santo Ton y Las Limas, ubicadas en el municipio de Chenalhó.
Y es que desde hace 45 años, entre Chalchihuitán y Chenalhó existe un conflicto violento por los límites territoriales entre ambos municipios, razón principal por la que los habitantes deciden dejar sus hogares.
HOY NOVEDADES/MI MÉXICO