El joven Iván Altamirano necesita un tratamiento, cuyo costo asciende a los 30 mil pesos.
Una pareja acusó a Iván Altamirano de secuestrador, provocando que fuera golpeado y asaltado por ambulantes y transeúntes.
El joven poblano, Iván Altamirano, aseguró que la Fiscalía General de Puebla no aceptó la denuncia en contra de Mireya Berenice y Michelle Sastre, quienes lo acusaron de secuestrar a su hijo, provocando que fuera golpeado y asaltado por un tumulto de ambulantes.
Recientemente circuló un video en redes sociales sobre Iván, quien pasó de ser héroe a víctima, en el que se aprecia cómo transeúntes y comerciantes de las calles 5 de Mayo y Poniente 10 casi lo linchan y despojan de sus pertenencias, luego de que la pareja lo acusara de intento de secuestro.
Tras haber aclarado su papel en este conflicto, Altamirano aseguró que la Fiscalía General del Estado de Puebla no aceptó la denuncia en contra de Michelle y Mireya, bajo el argumento de que no fueron quienes golpearon directamente.
Después de la golpiza, el joven poblano recibió atención médica, misma que le costó a su familia aproximadamente seis mil pesos; ahora se encuentra bajo tratamiento para que los golpes no le dejen secuelas, sin embargo, tienen que conseguir un medicamento que cuesta aproximadamente 30 mil pesos.
Al respecto, los padres del menor señalaron en entrevista que lamentan lo ocurrido al joven que solamente quería ayudarlos, que han recibido amenazas en redes sociales y pidieron a las autoridades que se investiguen los hechos a fondo para que se descubra a los verdaderos culpables.
Sin embargo, Iván no confía en dichas versiones y asegura que la pareja se dedica a hacer este tipo de provocaciones para robar a quienes transitan por el Centro Histórico de Puebla.
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