El precio de los combustibles, específicamente la gasolina se ha visto modificado de manera negativa, luego de que Petróleos Mexicanos iniciara a mayor escala la importación del crudo refinado, proveniente de los Estados Unidos.
De acuerdo con datos de la petrolera, en el país se importan 503 mil barriles al día, lo cual, es 1.5 veces más el volumen que producen las refinerías en el país; de hecho, en cuanto a gasolinas, la paraestatal ha tenido que comprar a los Estados Unidos gasolina de tipo regular a un precio promedio de 71.36 dólares por barril, con el fin de que no ocurra un desabasto, como el visto durante el mes de diciembre de 2016.
Sin embargo, Pemex ha hecho un negociazo con el producto final, ya que en promedio y aún con el precio del dólar en promedio de 19.74 durante los primeros cinco meses del año, esos 71.36 dólares por barril, se traducirían en 8.85 pesos por litro; sin embargo la gasolina Magna, desde la liberalización de los precios del combustible, se ha vendido en un promedio de 16.24 pesos por cada mil mililitros.
O sea que Pemex, ha ganado cerca de 7.39 pesos más que lo que se vende de manera regular el mismo combustible en Estados Unidos, aunque, claro, no se incluyen costos extras, como la transportación y la ganancia del menudista.
Aunque a pesar de estos costos, de acuerdo con Argus Media, firma especializada en precios de combustible, los costos de distribución, almacenamiento y transporte ascendería a un 11 por ciento, sin embargo, eso se traduciría en que la gasolina costaría 9.89 pesos por litro, además, la ganancia promedio del vendedor sería en promedio de 80 centavos por litro.
A pesar de que la ganancia neta asciende a casi 5.55 pesos por litro, las autoridades de Pemex indicaron que es la Secretaría de Hacienda y no ellos quienes determinan el valor del impuesto al combustible.
HOY NOVEDADES / MI MÉXICO