En años recientes, el tema de la violencia de género se ha convertido en un asunto incorporado a la agenda, teniendo como premisa que se considera violencia de género aquella que se ejerce por los hombres contra las mujeres. Aunque a veces basta con que una de las partes se sienta ofendida, sin parámetros claros o mediciones, hecho que complica la impartición de justicia. En política, un campo en el que existen contrastes estrategias comunicativas para arremeter en contra de los “adversarios”, se dificulta la interpretación de este concepto.
Entrando a temas concretos, la violencia política de género consiste en una acción u omisión dirigida a una mujer, por el hecho de ser mujer, que obstaculiza o anula el reconocimiento, goce y/o ejercicio de sus derechos político-electorales o en el ejercicio de su encargo.
Según el INE (Instituto Nacional Electoral), la violencia política contra las mujeres puede incluir, entre otras, violencia física, psicológica, simbólica, sexual, patrimonial, económica o feminicida.
Hay que tener en cuenta que una campaña política o campaña electoral es un esfuerzo organizado que busca influir en la decisión de un proceso en un grupo o en contra del movimiento contrario o personaje.
En ese sentido, en común, sobre todo en México, se utilizan este tipo de recursos o esfuerzos para atacar ideologías o favorecer las propias, como es el caso de la conferencia mañanera del presidente.
Lo anterior contempla acciones en las que se hace referencia a ciertos personajes a modo de “informar” sobre hechos o personas que realizan acciones contrarias al ideal del poder, “la Cuarta Transformación”, donde se utiliza material de origen público como lo son datos abiertos o, en su defecto, el sistema judicial, que están al alcance de cualquier persona.
Xóchitl Gálvez, aspirante a la candidatura de oposición, presentó una denuncia en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador por violencia política de género.
La senadora comentó en redes sociales que “una cosa es aguantar los chismes del Presidente todas las mañanas… y otra muy distinta es tolerar la ilegalidad”.
El presidente se ha pronunciado sobre Gálvez, de quien ha dicho que es “la candidata de la oligarquía” y ha cuestionado su identidad indígena. Todo lo anterior lo ha hecho en general con el bloque del Frente Amplio por México, por lo que surge la siguiente pregunta: ¿por qué en este caso se toma como presunta violencia de género? ¿Qué pasa con los ataques de hombres contra hombres o de mujeres contra hombres?