El sacerdote católico y defensor de los derechos humanos, Alejandro Solalinde, estimó que los recursos generados por el robo de combustible en el estado podrían servir para financiar campañas políticas para las elecciones presidenciales de 2018.
Fue en la presentación del libro «Juicio al Estado Mexicano por la violencia estructural causada por el libre comercio. Audiencia Final del Capítulo México del Tribunal Permanente de los Pueblos: libre comercio, violencia, impunidad y derechos de los pueblos», donde el reconocido activista afirmó que el robo de hidrocarburo en la entidad no es sólo «crimen organizado» sino que probablemente también es «crimen autorizado», pues no descartó que haya autoridades coludidas en esta actividad.
Asimismo, acusó a los gobiernos el PRI, PAN y PRD de aprovecharse de sus posiciones para beneficiarse económicamente de la explotación de recursos naturales nacionales, como el agua y materiales, con empresas trasnacionales, como mineras.
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