Ejidatarios de la comunidad Santa Ana Hueytlalpan, Tulancingo, buscaron el apoyo del alcalde Fernando Pérez, ya que por obras federales la presa San Francisco San Alejo ha sido afectada con tierra acumulada por una constructora, lo que provocará inundaciones. Ante esto, el gobierno municipal funge como mediador. Foto: Síntesis

Benjamín Rico Moreno, titular de la Secretaría de Medio Ambiente en Hidalgo, indicó que dos verificentros en el estado han sido clausurados de manera definitiva por incurrir en ilegalidades, y otros cinco más se encuentran en proceso de suspensión e, incluso, revocación por irregularidades.

El Titular señaló que Hidalgo está inmerso en la Comisión Ambiental de la Megalópolis y uno de los compromisos del estado, junto con otras cinco entidades, es el cumplimiento estricto de la norma 167, que inicialmente era emergente, pero esta vez volvió a aplicarse y se considera que en el segundo semestre de este año ya se va a quedar con algunas modificaciones de manera permanente.

«Los centros de verificación no estaban cumpliendo y los hologramas del estado corrían el peligro de no reconocerlos, por eso es que nos vimos en la necesidad de ser más estrictos con ellos para poder pasar este reconocimiento» explicó.

Mencionó que se tienen 36 verificentros abiertos y 26 siguen clausurados por no cumplir con la norma, fundamentalmente no están cumpliendo en dos cosas, en la calibración de la prueba del dinamómetro y, tenemos que reconocer, que estaban trampeando muchas cosas y eso hacía que se presentaran las famosas lecturas planas.

Señaló que quienes hoy están abusando de estas prácticas, no sólo se les ha clausurado, sino que ya suspendieron dos concesiones, una es en Pachuca y la otra es en Tulancingo, se les canceló total y absolutamente la concesión por prácticas ilegales, pues estaban manipulando los equipos que permiten enviar los datos hacia el sistema central, que es el que finalmente autoriza la expedición del holograma y la impresión de todos los datos del automóvil.

Indicó que están en proceso de posible suspensión o revocación de otras concesiones, siendo dos en Pachuca, una en Tulancingo y una en Tula, por irregularidades o bien por obsolescencia en sus equipos.

Explicó que los verificentros no tienen aparatos nuevos, pero ahora ya los pusieron a trabajar, como deben de funcionar.

Finalizó que este año vencen todas las concesiones de los centros de verificación, y ahora van a ser mucho más estrictos en la norma, y sobre todo en los equipos que están requiriendo para poder cumplir.

HOY NOVEDADES/HIDALGO