A pocos días de que Javier Duarte fuera detenido en un hotel de Guatemala, el coordinador del PRI en el Senado, Emilio Gamboa Patrón, sostuvo que el ahora ―no sólo «exgobernador», sino «expriista»―, pronto será juzgado en México y, de ninguna manera, «tuvo, por ahí, un arreglo para entregarse, eso es falso».
Al llegar los tiempos electorales, las corrientes del río se han vuelto más que tenebrosas para el Revolucionario Institucional, pues a la par, el gobierno federal pasa por su peor momento en lo que a credibilidad se refiere, y respecto a Duarte la sociedad ha señalado que tal detención es un fingimiento para que el partido obtenga buenos resultados en las elecciones.
No obstante, Gamboa Patrón afirmó que en el caso de Duarte de Ochoa se aplican las palabras del presidente Enrique Peña Nieto, en el sentido de que no habrá impunidad para nadie.
«Quien haya delinquido debe venir a defenderse. Duarte tendrá que venir a defenderse, si tiene datos para hacerle frente a la justicia», sentenció Gamboa a los periodistas en el Senado.
Aseguró que, de ninguna manera, ocurre una «cacería de brujas», lo que pasa es la persecución por parte de la justicia de hechos que pueden ser violatorios de la ley.
Por ende, el que la detención del exgobernador de Veracruz parezca una cacería de brujas o un trueque electoral, sencillamente es una «mera y llana coincidencia» con lo que pudiera resultar en los comicios del 4 de junio.
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