También resultaron heridas ocho personas.
Aún no se ha podido identificar a los reos que fallecieron en la riña.
De acuerdo con información brindada por el vocero de Seguridad de Nuevo León, Aldo Fasci Zuazua, y reproducida por medios nacionales, trece personas murieron, una de ellas calcinada, y ocho individuos resultaron heridos de gravedad, entre ellos un policía, como resultado de los disturbios al interior del penal de Cadereyta.
El funcionario declaró en rueda de prensa que aún no están identificados los reos que fallecieron por lo que en este momento se hace un recuento. Además no se descarta que la cifra de muertos aumente debido a que hay varios lesionados de gravedad.
«No están identificados aún las personas que perdieron la vida, se está haciendo un recuento», indicó.
Fasci Zuazua enfatizó que «en este momento el centro penitenciario está resguardado, está en control», aseguró.
El funcionario agregó que se realizarán las investigaciones correspondientes para saber quiénes murieron en manos de otros internos y quienes por parte de las autoridades, que tuvieron que ingresar y hacer uso de la fuerza letal debido a que la situación estaba fuera de control. Este uso de fuerza letal fue por parte de Fuerza Civil, la Policía Federal y de la Agencia Estatal de Investigaciones.
«Se tuvo que tomar la determinación por parte de las fuerzas del orden de usar fuerza letal para impedir que se asesinara a tres custodios que fueron secuestrados por los internos y también para evitar más muertes entre los mismos internos. Está justificado el uso de esta fuerza por el Código Penal», sostuvo.
Los penales del estado de Nuevo León tienen un largo historial de sucesos violentos debido a sus condiciones de hacinamiento y sobrepoblación, como ya había declarado en ocasiones anteriores el vocero de Seguridad, en testimonio recuperado por Proceso. En el estado existen dos penales de mediana seguridad que son los de Cadereyta y Apodaca, con más de 20 años de antigüedad, y otro más, de baja, que es el del Topo Chico, de siete años. Entre los tres actualmente tienen unos siete mil internos, de los cuáles cinco mil 500 son estatales y mil 500 federales.
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