La bancada panista lo acusó de traición.

Acción Nacional había acordado impulsar en la presidencia a Laura Rojas y Adriana Dávila.

El senador del PAN Ernesto Cordero, asumió anoche la Presidencia del Senado, en medio de fuertes acusaciones de traición provenientes de su propia bancada. Cordero tomó protesta como Presidente de la Mesa Directiva del Senado para el tercer año de ejercicio de la actual legislatura.

Este señalamiento hacia el senador se produjo debido a que en su partido habían acordado impulsar en la presidencia a Laura Rojas y Adriana Dávila. Mientras tanto, la vicecoordinación quedó en manos del senador perredista Luis Sánchez, en tanto que la presidencia de la Junta de Coordinación Política es presidida ahora por Emilio Gamboa Patrón. Por su parte, Manuel Bartlett, del PT, preside ahora el Instituto Belisario Domínguez.

«Habremos de analizar la conducta de cada cual, pero el peor castigo es tener la vergüenza de haber traicionado al PAN», señaló Fernando Herrera, coordinador del Grupo Parlamentario del PAN en el Senado.

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