El Aeropuerto Internacional de Muan fue escenario de una de las tragedias aéreas más graves en la historia de Corea del Sur. El domingo, el vuelo 2216 de la aerolínea surcoreana Jeju Air, que cubría la ruta entre Bangkok y Muan, se estrelló durante un aterrizaje de emergencia. El Boeing 737-800, con 181 personas a bordo, impactó contra una pared y estalló en llamas, dejando 179 víctimas mortales. Solo dos miembros de la tripulación sobrevivieron.

La tragedia en el lugar del accidente

Equipos de rescate trabajaron intensamente para sofocar el incendio y recuperar cuerpos entre los restos del fuselaje. Mientras tanto, en el aeropuerto, el hedor a gasolina y los escombros —asientos, maletas y metal torcido— eran un recordatorio de la devastación. Los nombres de las víctimas se mostraban en las pantallas del aeropuerto, mientras los familiares esperaban, sumidos en el dolor.

“Mi hermana pequeña se ha ido al cielo hoy”, expresó Jo, una mujer de 65 años, quien esperaba noticias sobre su ser querido. Entre las víctimas había niños, el más pequeño de tres años y el mayor de 78.

Contexto político y repercusiones

El accidente ocurre en medio de una crisis política en Corea del Sur tras la suspensión del presidente Yoon Suk Yeol. Las pistas del aeropuerto permanecerán cerradas mientras las autoridades investigan las causas del incidente. Entre las hipótesis preliminares, se menciona un posible impacto de un ave en una de las alas del avión.

También te puede interesar: Trump solicita suspensión de plazo para prohibición de TikTok

Las imágenes de los últimos mensajes de texto entre un pasajero y su familia, donde expresa preocupación por el estado del vuelo, han conmovido a las redes sociales, reflejando la magnitud de esta tragedia.

Corea del Sur guarda luto mientras el país enfrenta uno de los momentos más oscuros de su historia reciente.

Con información de medios.

KJCS

NOTAS RELACIONADASMÁS DEL AUTOR