El mandatario cuestionó en una entrevista televisiva nuevamente el desempeño de Jeff Sessions como secretario de Justicia.
Además, Trump manifestó que si es destituido como presidente de Estados Unidos los mercados financieros colapsarían.
La tensa relación entre Donald Trump y Jeff Sessions tiene un capítulo más. Ahora el presidente de Estados Unidos arremetió contra el secretario de Justicia al exigirle que también les dé seguimiento legal a los fiscales que investigan a su gobierno y a los demócratas.
Las discrepancias entre ambos funcionarios tienen más de un año y se acentuaron cuando Sessions tomó distancia en la investigación de la supuesta injerencia rusa en las pasadas elecciones, la cual encabeza el fiscal especial Robert Mueller, esto fue mal visto por Trump.
En este sentido el mandatario declaró: «Jeff Sessions se apartó, algo que no debería haber hecho o me lo debería haber dicho. Aceptó el trabajo y luego dijo ‘voy a apartarme (del rusiagate). ¿Qué tipo de hombre es ese?» (…) Por cierto, él estaba en mi campaña electoral. La única razón por la que le di el trabajo es porque sentía lealtad. Me apoyaba desde el principio».
Trump indicó que Sessions no ha desempeñado bien su labor: «Nombré a un fiscal general que nunca tomó el control del Departamento de Justicia. Es algo increíble», externó.
Mientras tanto, Sessions respondió vía Twitter y refirió: «Mientras yo sea fiscal general, las acciones del Departamento de Justicia no serán influenciadas incorrectamente por consideraciones políticas». Agregó que la figura del secretario de Justicia en Estados Unidos es independiente a la Casa Blanca, por lo que nunca ha intervenido en debates políticos como, en este caso, el de la injerencia rusa en el proceso electoral.
Colapso financiero
Por otro lado Trump aseguró que si es destituido de la presidencia de Estados Unidos, la economía tendría graves problemas y los mercados financieros «se hundirían». Esto en alusión al posible proceso de destitución que podría abrir el Congreso norteamericano.
Este escenario se abrió una vez que Paul Manafort, ex jefe de campaña de Trump, fue encontrado culpable de crímenes financieros, mientras que Michael Cohen, su ex abogado, externó que el presidente tenía conocimiento y fue partícipe de las violaciones a las leyes de financiamiento electoral durante su campaña.
Al ser cuestionado sobre el hipotético juicio para buscar su destitución, Trump espetó: «Si alguna vez soy sometido a un proceso, creo que el mercado podría colapsar. Creo que todos podríamos ser más pobres (…) no sé cómo se puede someter a un proceso a alguien que ha hecho un gran trabajo».
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