En el marco del Día Mundial del Agua, celebrado el día de ayer, 22 de marzo, de acuerdo con información emitida por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en 2040 la escases de agua será tal, que aproximadamente 600 millones de niños, es decir, uno de cada cuatro menores de edad en todo el mundo, vivirán en zonas con recursos hídricos extremadamente limitados.
El informe indica que 36 países enfrentan, actualmente, niveles extremadamente altos de «estrés hídrico», que ocurre cuando la demanda de agua supera con creces la oferta renovable disponible, debido al crecimiento de la población, el aumento del consumo de agua y la gran demanda de este líquido debido a la industrialización y la urbanización.
Así mismo, el informe expone que los conflictos en muchas partes del mundo también amenazan el acceso de los niños al agua potable, haciendo de los más pobres y vulnerables, los más afectados por el aumento del estrés hídrico.
Asimismo, más de 800 niños y niñas menores de cinco años mueren diariamente debido a la diarrea relacionada con el agua, el saneamiento y la higiene inadecuados.
Por ello, el documento solicita, a los gobiernos, planificar cambios en la disponibilidad y demanda de agua en los próximos años, y a dar prioridad a los niños que no tienen acceso a este líquido.
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