El anuncio se hizo durante el discurso anual que brinda a la nación.
El presidente ruso señaló que su mensaje debe «calmar a cualquier agresor potencial»; informó que el nombre que ellos le dieron al misil es Sarmat, pero que, debido a su potencial, «los colegas extranjeros» lo denominaron Satán.
No solo Corea del Norte y Estados Unidos pueden alardear sobre la potencia de su arsenal nuclear, ahora Rusia hace lo propio. Vladimir Putin acaba de presumir que su país ha fabricado armas de propulsión nuclear que no podrán ser detenidos por la defensa de los enemigos, se trata de un misil de crucero y un dron submarino.
El mandatario ruso aseguró que el misil tiene un alcance ilimitado, por lo que podría llegar a cualquier parte del mundo, es altamente veloz y puede pasar sin problemas cualquier sistema antimisiles. Mientras que del dron submarino acotó que es capaz de alcanzar portaviones e instalaciones en la costa, además de que puede transportar una cabeza nuclear.
«Nadie en el mundo tiene algo igual, por ahora. ¡Es algo fantástico!», externó Putin, quien se atrevió a decir que «el sistema antimisiles estadounidense será inútil y no tendrá ningún sentido». Presumió que su ejército cuenta con «armas láser» e «hipersónicas» que ningún país podrá superar y que si esto ocurre en algún momento «para entonces nuestros muchachos ya habrán inventado algo más». También criticó al gobierno de Donald Trump por ordenar el despliegue estratégico en Rumania y Polonia.
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