En un evento frente a medios de comunicación, Olea Peláez presentó su renuncia al gobernador del estado.
Xavier Olea fungió como fiscal de Guerrero desde el 2015; el gobernador, Héctor Astudillo reconoció su labor en un periodo difícil para la entidad.
El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores recibió esta tarde, en el palacio de gobierno, la renuncia de Xavier Olea Peláez, quien fungiera como el Fiscal General de la entidad desde el 2015. En el evento, el ahora ex fiscal, señaló que su dimisión tiene motivos estrictamente personales y es irrevocable.
«He querido hacer del conocimiento del señor gobernador Héctor Astudillo Flores esta decisión y las razones personales que me motivaron. En primera instancia por ser el jefe del ejecutivo y en segunda, por el respeto, el cariño y la amistad que entre nosotros existe», dijo en un mensaje a medios de comunicación.
Por su parte, el gobernador de la entidad agradeció el apoyo de Olea Peláez en su paso por la Fiscalía del estado y reconoció que al asumir el cargo, Guerrero se encontraba en condiciones muy complicadas, por lo que su experiencia y conocimiento del marco legal, fueron de vital importancia para controlar el cúmulo de hechos que se suscitaron.
Cabe señalar que en 2013, Olea Peláez fue investigado por la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Tabasco cuando este, era abogado de José Manuel Saiz Pineda, tesorero del exgobernador de esa entidad, Andrés Granier.
Además, esta dimisión llega en un momento difícil para la entidad, ya que ha prevalecido un ambiente de inseguridad, sobre todo luego del asesinato de varios candidatos y ediles de la entidad. A ello se suman las declaraciones del obispo de Chilapa-Chilpancingo, quien dijo haber negociado con narcotraficantes de la zona para cesar la ola de asesinatos que azota la región.
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