AMLO buscará retirarle a Segob toda la estructura de seguridad.
La SSP se respaldará en las labores de inteligencia y coadyuvará con la PF, el SNSP y el CISEN.
Desde antes que Andrés Manuel López Obrador se hiciera con la presidencia de México ya venía cocinando propuestas para cambiar el funcionamiento actual de algunas secretarías y dependencias del gobierno federal, especialmente de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), cuyas tareas hoy día son competencia de Segob.
Esta proposición ya comenzó a avanzar, pues de acuerdo con El Universal López Obrador alista ya la presentación de una iniciativa que permita darle forma a una «super secretaría», con la que buscará retirarle a Segob toda la estructura de seguridad, para que la SSP se respalde en las labores de inteligencia y coadyuve con las distintas dependencias de procuración de justicia.
En el proyecto que el presidente electo entregará a legisladores se plantea que la SSP contribuirá con la Policía Federal, el Órgano Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social y el Consejo de Menores Infractores, así como con el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) que, desde su creación, también obedece a Gobernación.
Además, según la publicación de dicho periódico, la nueva SSP coadyuvaría con el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) y con la Unidad de Protección Civil del gobierno federal, «instituciones que deberán alinear sus esfuerzos de prevención y atención a situaciones adversas, a efecto de redimensionar la percepción que tiene la ciudadanía con respecto a la seguridad».
Es decir, si llegara a consolidarse la propuesta de López Obrador y Durazo, la nueva Secretaría de Seguridad no solo pasará a desprenderse de Segob, sino que se convertirá en una dependencia de gran tonelaje que concentrará funciones de la policía y las prisiones federales (PF), investigación criminal (CISEN) y la coordinación política, en materia de seguridad, con los gobiernos estatales y municipales (SNSP).
Pese a las enormes dimensiones que la Seguridad Pública tendría, Morena prevé que el rediseño de la estructura gubernamental esté listo antes de la toma de posesión de López Obrador el próximo 1 de diciembre.
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